Los precios de la energía solar siguen bajando

¿Es el fin de los combustibles fósiles? ¿Existe un boom de las energías renovables? Hasta ahora, las renovables han sido incapaces de superar a las energías fósiles como prioritarios en el pull energético de los países desarrollados como España. Sin embargo, el hecho de que los precios de la energía solar sigan bajando abren una nueva era en el equilibrio entre ambas fuentes de energía. ¿Por qué si las renovables son inagotables aún no han dado el sorpasso? El motivo hay que buscarlo en la tecnología que se utiliza para obtenerlas, no en la fuente en sí misma.
Sin embargo, cuando Tesla lanzó al mercado los tejados solares por debajo de 1,50 dólares por vatio, se marcó un antes y un después en el concepto de la energía solar como fuente de recursos rentable. La empresa de Elon Musk volvió a confirmar que se podía construir tecnología eólica de forma más económica y asequible para el gran público. Ahora, los módulos de silicio multicristalino que se importa de China tiene precios competitivos para la industria, y en último término, para los ciudadanos.
A ello se suma una realidad innegable: la mayoría de los estados cuentan con una política y una normativa que favorece a las renovables frente a las fósiles. España entre ellos.
¿Invertir en energía solar?
¿Es hora de invertir en energía solar? Como inversión, tienes que hacer números, ya que no se trata de un sistema de rentabilidad inmediata. De hecho, Sol Valencia, una de las instaladoras independientes de mayor peso en el mercado nacional y creadores de la mejor calculadora de presupuesto de instalación de placas solares, insiste en evaluar todos y cada uno de los factores antes de tomar la decisión definitiva.
Uno de los elementos que ha evolucionado en los últimos años es la competencia. Además de las grandes instaladoras dependientes de corporaciones multinacionales, también existen empresas más modestas como la propia Sol Valencia que ofrecen precios más competitivos a los propietarios finales y las comunidades de vecinos. “Hasta un 40% de ahorro certifican nuestros clientes”, explican. No hay duda de que la competencia en general ha sido muy eficaz para abaratar los precios.
Aumento de los costes de generación de energías contaminantes
El coste de la generación de energía nuclear aumentó un 22% a lo largo de la pasada década. El carbón, ya de por sí minoritario y en extinción, se ha mantenido estable, mientras que el petróleo se dispara. A día de hoy, únicamente el gas sigue la misma estela de abaratamiento de costes de producción que las renovables -la solar, sí, pero también la eólica y la biomasa-.
El cambio en la industria fotovoltaica ha sido tan drástico como que ha pasado de los 297 euros por MWh a finales de la pasada década a generar una inversión de 33 € por MWh en la actualidad. Esto supone una disminución del 89% del coste. El mismo camino sigue la eólica, que ha pasado de los 11 euros por MWh a los 33€. Esto supone un cambio de paradigma con una doble vertiente: se reduce el gasto energético de los hogares, que ganan en autonomía, y se reducen las emisiones de C02.
La energía solar en España
Si bien Israel continúa a la cabeza de la producción de energía solar y su peso en el mix energético nacional, España avanza a pasos agigantados para equilibrarse con sus socios de la Unión Europea.
En 2019 se instalaron en España 4.752 megavatios (MW) de energía solar fotovoltaica. Parte de este boom de las renovables se debe al abaratamiento de los materiales y la tecnología, sí, pero también al nuevo marco regulatorio que es más favorable para el autoconsumo de electricidad.
Las administraciones públicas han habilitado ayudas y subvenciones para la instalación de energía solar en todas las viviendas de nueva construcción -donde es obligatorio- y en las reformas de viviendas de segunda mano. Canarias, Andalucía, Murcia, Extremadura, Galicia o Madrid, entre otras comunidades autónomas cuentan con estos beneficios.
Sol Valencia explica que, en el caso de Valencia, por ejemplo, además hay una importante rebaja en el IBI y en la declaración de la renta.