Causas Comunes de la Humedad en Edificios en Valencia y su Impacto

En la zona del levante, la humedad media oscila entre el 70% y el 75%, llegando incluso a alcanzar el 80% en ciertos lugares. Estos valores se encuentran por encima de los considerados ideales para la salud.
Por eso es necesario disponer de mecanismos de control, para evitar la aparición de problemas diversos, como mohos, ácaros, alergias e incluso afecciones respiratorias derivadas del exceso de humedad en viviendas y edificios.
En Valencia, por su ubicación geográfica y características climáticas, los problemas de humedad son especialmente comunes tanto en viviendas antiguas como en construcciones más recientes.
Entender por qué se produce y cómo afecta a los edificios, y a nuestra salud, es clave para prevenir daños mayores y mantener un hogar sano y confortable.
Si sospechas que tu vivienda o comunidad de vecinos puede estar afectada por humedades, lo ideal es contactar con especialistas en tratamiento antihumedad en Valencia, ya que ofrecen soluciones personalizadas para cada tipo de humedad, garantizando resultados duraderos y evitando que el problema reaparezca.
4 causas comunes que producen humedad en viviendas y edificios
1. Clima mediterráneo y alta humedad ambiental
Valencia tiene la suerte de poder disfrutar de un clima mediterráneo templado y agradable casi todo el año. Sin embargo, su proximidad con el mar y los altos niveles de humedad relativa del aire favorecen la aparición de condensaciones en viviendas mal ventiladas.
Sobre todo, durante los meses más fríos, el contraste entre la temperatura exterior e interior provoca que el vapor de agua se acumule en forma de gotas sobre paredes y ventanas.
Si no se corrige este problema, la condensación constante puede deteriorar pinturas, provocar moho y dañar muebles o los marcos de madera.
2. Filtraciones por lluvias o daños estructurales
Las lluvias intensas de otoño e invierno en Valencia pueden colarse por pequeñas grietas en cubiertas, tejados o fachadas. Con el paso del tiempo, el agua penetra en los muros, debilitando el material y generando humedades que se manifiestan a través de manchas o desconchados.
Además, las filtraciones también pueden venir del subsuelo, especialmente en plantas bajas y sótanos. Si la impermeabilización de los cimientos no es la adecuada, el agua del terreno asciende por la capilaridad hasta las paredes interiores, un problema que requiere atención profesional inmediata.
3. Problemas en las instalaciones de fontanería
Una causa menos visible, pero igual de común, son las fugas en tuberías o desagües. En muchos edificios antiguos, las tuberías por las que pasa el agua se encuentran empotradas en los muros, lo que dificulta detectar las pérdidas a simple vista.
Un pequeño goteo constante puede ser suficiente para generar humedad persistente, malos olores y deterioro de los acabados.
Por eso, si sospechas de una fuga, te recomendamos realizar una inspección técnica con herramientas especializadas, como cámaras térmicas o detectores de humedad.
4. Falta de ventilación y aislamiento deficiente

En viviendas modernas, la eficiencia energética ha ganado protagonismo, pero a veces un exceso de hermeticidad impide la correcta renovación del aire.
Cocinas, baños y dormitorios sin una ventilación adecuada pueden concentrar el vapor generado por la vida diaria (duchas, cocción de alimentos, respiración), lo que acaba convirtiéndose en humedad de condensación.
Una buena ventilación cruzada, la instalación de sistemas de ventilación mecánica o el uso de materiales transpirables pueden marcar la diferencia para mantener un ambiente saludable y seco.
Soluciones efectivas para prevenir y eliminar la humedad
Cada tipo de humedad necesita un tratamiento específico. En el caso de la humedad por capilaridad, los especialistas aplican barreras antihumedad que impiden el ascenso del agua desde el subsuelo.
Para la condensación, se recomienda mejorar la ventilación y el aislamiento térmico. Y ante filtraciones o fugas, es vital reparar las causas estructurales antes de aplicar cualquier revestimiento.
No obstante, contar con el asesoramiento de una empresa con experiencia, garantiza un diagnóstico preciso y soluciones personalizadas, adaptadas tanto a viviendas de particulares como a edificios públicos o comunidades de vecinos.
Las humedades en los edificios de Valencia son un problema común, pero no es inevitable.
Si notas manchas, olor a humedad o moho en casa, no lo dejes pasar y búscate un buen tratamiento antihumedad puede marcar la diferencia entre un problema temporal y uno que se agrave con el tiempo.












