¿Cómo pulir el metacrilato correctamente?

El metacrilato se ha convertido, con el paso de los años, en uno de los plásticos más utilizados en múltiples tareas que van desde la impresión de grandes formatos hasta construcción, automovilismo, mobiliario, rotulación, etc. Convirtiéndose, gracias a su alta transparencia (0,93), su flexibilidad, poco peso y versatilidad, en la alternativa perfecta a otros materiales como el vidrio. No obstante, que para muchos sea el material del SXX y SXXI no implica que no haya que tener en cuenta diversos aspectos antes, durante y después de manipularlo. En el siguiente texto os explicamos, paso a paso y de una forma llana y cercana, como pulir el metacrilato perfectamente.
¿Qué es el metacrilato y por qué es necesario pulirlo?
Antes de entrar en materia debemos tener varias cuestiones en consideración, tanto conceptuales como de diseño, para comprender la importancia de un material como el metacrilato. No en vano, el metacrilato o polimetilmetacrilato (PMMA) es un material plástico compuesto por polímeros de metacrilato de metilo. Algo que le aporta importantes propiedades y características que van desde la rigidez o la casi indestructibilidad hasta su flexibilidad. Algo que, como os podéis imaginar, aporta múltiples posibilidades y tratamientos que no solo se limitan a pulir metacrilato. Destacando otro tipo de actuaciones como el corte, la coloración o el lijado. Por mencionar sólo alguno de los tratamientos más señalados.
Nos encontramos ante un material relativamente reciente. No en vano, su invento data de principios del SXX. Siendo obra del químico alemán Otto Röhm. Aunque eso sí, las cosas de palacio van despacio, no pudo comenzar a comercializarce hasta 1930. Destacando su uso en el mundo del transporte, la construcción o, y aquí nos encontramos ante un gran punto de inflexión, la impresión y rotulación. Puestos en antecedentes, ¿cuáles son los pasos necesarios para lograr pulir metacrilato?
Pulir metacrilato paso a paso
Ya hemos comentado las múltiples propiedades que atesora el metacrilato. No obstante, también nos encontramos con un material que requiere tratamientos específicos en determinadas condiciones y situaciones. A continuación, nos centramos, paso a paso, en el proceso de pulir metacrilato. Aportando, por el camino, una serie de tips fundamentales a la hora de trabajarlo.
Cuestión de herramientas
Pulir metacrilato no es una tarea demasiado complicada. Es más, el proceso viene a ser realmente sencillo. No obstante, sí que es cierto que, más allá de la experiencia (aquí también es un grado) contar con las herramientas adecuadas resulta total y absolutamente fundamental. A continuación, os dejamos algunos de los elementos imprescindibles antes de comenzar el proceso.
– Taladro
– Discos específicos para el pulido (varios granos)
– Soplete (propano o acetileno)
– Papel de lija o lana abrasiva (os recomendamos tener a mano distintos tipos de grano)
– Pasta especial para abrillantar y pulir metacrilato
– Mascarilla FFP2 en adelante, guantes y gafas de seguridad.Paso a paso
En muchos casos el metacrilato cuenta con imperfecciones en los cantos debido a roces o defectos tras un corte. Por fortuna, siempre puedes pulirlos para que queden transparentes. El primer paso, tras ponernos las gafas, guantes y mascarilla, pasa por aplicar la pasta específica en los cantos a tratar. Posteriormente toca usar el taladro y repasar con mucho cuidado y delicadeza dichos cantos con el disco de pulido. Resulta recomendable ir parando cada x segundos para ver cómo va el proceso.
En el caso de pequeñas rayas o arañazos basta con usar la pasta específica (que suele ser diferente a la usada con el taladro) sobre el desperfecto a tratar. Para ello usa un trapo y realiza movimientos circulares sobre dicha superficie hasta que el rayón deje de ser visible. Vamos, lo que viene siendo un «dar cera, pulir cera» en toda regla. En el caso de que decidáis pulir con soplete la cosa cambia. Y es que es necesario lijar los bordes con la lana abrasiva y, posteriormente, pasar el soplete para dejar a tu gusto el acabado de los cantos. Ojo, cualquier soplete no vale. Siendo recomendable los de propano o acetileno. Por otro lado, la llama no debe ser de mayor grosor que un lápiz y las aproximaciones al metacrilato suaves y mediante movimientos constantes y no demasiado lentos.
Consejos para pulir metacrilato
Para finalizar este artículo, pero no por ello menos importante, compartimos con todos vosotros algunos tips a tener en consideración a la hora de pulir metacrilato. Y es que, como suele decirse, un buen consejo nunca viene mal.
– Limpia las distintas superficies antes de comenzar el trabajo, pero nunca lo hagas en seco (puedes rallarlo). Utiliza soluciones de agua y un poco de jabón.
– Utiliza solo productos de total, y contrastada, confianza.
– El dentífrico suele ser una buena solución para tapar los arañazos más superficiales.
– Ten mucho cuidado a la hora de manipular el metacrilato. ¿Nuestro consejo? Coge las láminas por el centro y no por los extremos.