Innovación en Construcción: los Robots Albañiles

Innovación en Construcción: los Robots Albañiles 47267

Estamos asistiendo a un acelerado proceso de automatización de todos los sectores y ámbitos de nuestra vida, desde lo personal, hasta lo social y laboral. Aunque con menor fuerza, los efectos de esta ola tecnológica también empiezan a notarse en el sector de la construcción. Así, elementos de innovación como el uso de impresoras 3D o de robots albañiles, pueden suponer un auténtico cambio de paradigma.

En este artículo vamos a explorar cómo la tecnología robótica podría revolucionar el sector de aquí a unos años.

 

La robótica en la Construcción

La industria de la construcción es una de las más antiguas que existen, así como una de las más apegadas a sus métodos y procesos.

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Fuente: Construcción Yura

Se estima que los ladrillos como elemento para la construcción tienen una antigüedad de unos 11.000 años, y durante todo este tiempo, hemos sido los humanos quienes hemos colocado uno sobre otro.

No fue hasta hace poco más de 5 años, en 2016, que la posibilidad de robotización se coló en el sector, con promesas de acelerar el proceso al ritmo de 1.000 ladrillos por hora.

Se trata de un campo que evoluciona a pasos de gigante y puede ocasionar un cierto miedo o rechazo ante la posible eliminación del trabajador humano. 

Pero dado que su avance es imparable, habría que considerarlo como un añadido que puede aumentar la seguridad, la rapidez y el control de los procesos, reducir los costes y homogeneizar los resultados.

Los trabajadores humanos pasarán de realizar los trabajos manuales, a sentarse tras las máquinas en cuestión.

 

Hadrian X y la posibilidad de construir una casa en 48 horas

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Fuente: Fastbrick Robotics

Uno de los mayores éxitos de la robótica en el sector ha sido Hadrian X, de los australianos Fastbrick Robotics

Bautizado en honor al emperador romano Adriano, quien durante su reinado promovió grandes construcciones, ha sido necesaria más de una década para su fabricación.

La idea de un robot con tecnología de estabilización dinámica (explicada más adelante) surgió en 1994, pero el primer prototipo no se creó hasta 11 años después, en 2006. La crisis de 2008 frenó el proyecto, finalmente retomado en 2014. El desarrollo de la versión actual, el Hadrian X, comenzó en 2016.

 

La estructura del robot

El robot cuenta con un brazo mecánico capaz de instalarse en diferentes vehículos, pudiendo así ser transportado hasta donde sea requerido, además de moverse para llevar a cabo las tareas que se programen. 

Hadrian X es capaz de colocar el equivalente de 1000 ladrillos normales en una hora, terminando una casa en apenas dos días. Hablamos de equivalentes porque la máquina trabaja con ladrillos especiales 12 veces más grandes que los tradicionales, más fuertes y ligeros.

Una vez los ladrillos se cargan, el robot los identifica, sabiendo de antemano dónde colocarlos. Además, es capaz de cortarlos para otorgarles la forma y tamaño requeridos.

Los ladrillos se mueven dentro del brazo mediante una cinta transportadora hasta el cabezal que los coloca en el sitio adecuado gracias a un sensor y un láser

Para unir los ladrillos, se emplea un adhesivo diseñado especialmente para el caso, el cual seca en 45 minutos y aumenta el aislamiento de la construcción.

Así, es capaz de construir estructuras completas, dejando el espacio necesario para la colocación de puertas, ventanas, cables o fontanería.

 

El software de Hadrian X

Respecto al software, para conseguir la mayor precisión posible la estructura del muro es traducida a metadatos. Así, utilizando coordenadas cartesianas y diseño paramétrico, se asigna a cada pieza un lugar exacto.

Estos metadatos, junto a un algoritmo diseñado también por el equipo, indican a Hadrian X el patrón de colocación, así como otros factores como la forma de agarrar los ladrillos.

Destaca la ya mencionada tecnología de estabilización dinámica, la cual posibilita la reacción en tiempo real a multitud de factores ambientales. Así, el viento por ejemplo no afecta a la precisión del brazo robótico.

Esta tecnología supone un increíble aumento de la seguridad y la eficiencia en los procesos de construcción. Logra reducir los desperdicios producidos y rebajar considerablemente los costes globales.

El software incluye un sistema de gestión de residuos generados, así como la posibilidad de crear proyectos de varias plantas.

 

Otros robots: Semi-Automated Mason (SAM)

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Fuente: Construction Robotics

Si bien Hadrian X ha sido todo un hito en la robotización de la industria, no es el único robot en funcionamiento. SAM, la versión abreviada de Semi-Automated Mason (albañil semi-automatizado) también ha supuesto una auténtica revolución en términos de producción y productividad.

Este robot, creado por Construction Robotics, una empresa neoyorquina, ha sido diseñado para colocar ladrillos, pudiendo alcanzar los 3.000 al día, frente a los 500 que puede colocar un albañil humano.

A diferencia de su congénere australiano, SAM requiere de la presencia de dos operarios para funcionar, uno cargando ladrillos y otro alisando el hormigón que el robot coloca sobre los bloques.

Así, el objetivo de SAM no es sustituir la mano de obra humana, sino colaborar con la misma, reduciendo los costes totales en un 50% y triplicando o quintuplicando la productividad habitual.

El robot cuesta medio millón de dólares, pero en función de las dimensiones del proyecto podría tratarse de una inversión a considerar.

 

¿Qué depara el futuro para los trabajadores de la Construcción?

Vistas las aptitudes y capacidades de estos robots albañiles, la pregunta surge de manera natural y no sin cierto miedo, ¿llegarán a sustituir a los trabajadores humanos

En principio estas máquinas no han sido diseñadas con tal fin, sino que buscan trabajar junto a las personas, aumentando la productividad, seguridad y eficiencia, pero la duda es razonable y un cierto temor está justificado.

Por ahora el panorama no ha avanzado lo suficiente como para prescindir de la mano de obra humana, pero los avances ocurren a tal velocidad que es imposible prever la situación de aquí a diez años.

¿Tú qué crees? ¿Terminarán los robots por convertirse en los únicos trabajadores de la construcción? Déjanos tu opinión y previsiones de futuro en los comentarios.

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