Ventajas de la Calefacción Centralizada en Comunidades de Vecinos

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Los sistemas de calefacción centralizada son instalaciones de climatización que cuentan con serias ventajas.

Están pensados para dar servicio a varias viviendas o locales, y especialmente indicados para comunidades de vecinos. Esto es así tanto por el ahorro de energía que se lleva a cabo, debido a su mayor rendimiento, como por el ahorro en la factura.

El sistema más común para este uso es el de agua caliente. Emplea una caldera donde se calienta el agua y el calor se desprende por el radiador o por suelo radiante, llevando el agua calentada por medio de una red de tuberías.

Para evitar que el agua caliente tarde en llegar desde el depósito central al grifo donde se va a usar, se utiliza un circuito de retorno, en el que el agua calentada recircula para que siempre haya agua a temperatura adecuada.

 

1,7 millones de hogares españoles poseen instalaciones de Calefacción Centralizada

En España existen 5 zonas climáticas, donde en las más frías, se hace más frecuente el uso de calefacción centralizada para poder ahorrar costes.

En todo el norte peninsular y centro es necesaria la calefacción debido a las bajas temperaturas exteriores en invierno.

Aproximadamente el 40% de las fincas de la Comunidad de Madrid, Castilla y León o Castilla-La Mancha disponen de calefacción central.

 

Se aconseja la sustitución de calderas de más de 15 años

Los sistemas de calefacción centralizada en España, llevan instalándose desde hace unos 40 años. El “boom” de esta instalación se produjo en los años 80.

Para sustituir la caldera existente por otra nueva, deben seleccionarse aquellas cuyo rendimiento energético sea el más alto, además de tener en cuenta el régimen de funcionamiento previsto para la misma.

Se debe de analizar la rentabilidad, considerando no sólo el coste de la nueva caldera, sino también el consumo de energía a lo largo de su vida útil.

Por ejemplo, en España, el gas natural tiene un precio por unidad de energía entre un 20-30% inferior para una calefacción central de un edificio que para individuales.

 

Nuevos sistemas eficientes de Calefacción Centralizada

El esquema básico de funcionamiento consiste en una o más calderas con dos circuitos de distribución, para el agua caliente sanitaria (ACS) y para calefacción, para toda la comunidad de vecinos.

Además cuenta con el apoyo térmico de captadores solares, situados en la cubierta del edificio con orientación sur, que calientan el agua mediante unos intercambiadores de calor.

Cada vivienda, debe disponer de contadores de energía para la calefacción y de volumen para el ACS.

La instalación de la calefacción de cada usuario dispone de un termostato de ambiente asociado a un dispositivo de corte que le permite seleccionar el horario y las temperaturas deseadas.

Por otra parte, una ventaja de la calefacción centralizada para todo el edificio es que hace que los rendimientos sean mayores y se consigan ahorros energéticos.

En nuestro país existen gran cantidad de comunidades de vecinos que disponen de una calefacción centralizada que no contabiliza el consumo individual por vivienda.

A partir del 1 de enero de 2017 será obligatorio la contabilidad individualizada de consumos para todas las instalaciones térmicas, de calefacción, de refrigeración y de agua caliente sanitaria.

Para cumplir la ley, se deberán instalar unos dispositivos de conteo, cuyo precio oscila entre los 20 y 25 euros, más el coste del servicio de conteo (unos 4 euros por radiador).

Existe otra opción de alquilar los dispositivos a una empresa especializada por unos 7 euros/año por cada radiador.

Si no se cumpliera, existe una sanción, de que el vecino que se niegue a adherirse al nuevo sistema, deberá pagar como el vecino que más consume.

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