Ley de Arrendamientos Urbanos: las claves que regulan el alquiler en España

En España, las normas legales que regulan el derecho inmobiliario, y el relacionado con el urbanismo, están recogidas en la Ley de Arrendamientos Urbanos.
Se trata de una ley compleja que reúne una serie de normas legales que regulan todo lo relacionado con la vivienda y el alquiler, sin importar el futuro uso de los inmuebles.
Para situarnos un poco mejor antes de entrar en detalles, definamos conceptos. El arrendamiento urbano es un contrato que contempla la cesión del uso de un inmueble, ofreciendo una renta a cambio.
De esta manera, el propietario o arrendador cobra al inquilino o arrendatario por usar un inmueble, ya sea con fines de vivienda, local, garaje, etc.
Así pues, la Ley de Arrendamientos Urbanos es la que regula el mercado en el que ocurren todos estos procesos.
Duración de los contratos de alquiler y meses de fianza máximos

Tras la reforma de la Ley en 2019, la duración mínima de los contratos de alquiler pasó de 3 años a 5. De ser el propietario una persona jurídica, la duración mínima del alquiler sería de 7 años.
Respecto a la renovación de los contratos, la prórroga ha pasado a durar 3 años en vez de 1.
En el caso de que alguna de las partes no quiera renovar el contrato, se dispondrá de diferentes periodos de tiempo para notificarlo.
El propietario deberá informar con un mínimo de 4 meses de antelación al inquilino. Este, por su parte, podrá avisar con 2 meses de antelación.
Si el propietario no lo comunica en el período estipulado, el arrendatario podría extender el arrendamiento hasta 3 años.
Respecto a la cantidad de fianza máxima contemplada, el propietario no podrá pedir más de lo correspondiente a dos meses de alquiler. Sin embargo, a esto se le sumará un tercer mes obligatorio depositado en la Comunidad Autónoma.
Rescisión de los contratos

Una vez han transcurrido 6 meses, el inquilino puede decidir irse, siempre y cuando informe de ello con 30 días de antelación. Si decide abandonar la vivienda antes del medio año, habrá de abonar la diferencia hasta los 6 meses.
En ciertas circunstancias, el inquilino podrá no respetar este límite temporal. Se contempla por ejemplo en el caso de que el arrendador no quiera hacer reparaciones necesarias en el inmueble.
En el caso del propietario, existen diversos supuestos en los que podría rescindir el contrato respetando la Ley de Arrendamientos Urbanos. Por ejemplo, sería el caso del impago de la renta, la realización de actividades ilícitas en el inmueble o de obras sin permiso, así como el subalquiler de alguna habitación de la vivienda.
De un modo u otro, el propietario deberá notificarlo con 2 meses de margen, pudiendo entrar en procesos judiciales si el inquilino se niega a abandonar el inmueble.
Variaciones en el precio de los alquileres
La actualización de la renta del alquiler se refiere a la capacidad del propietario de aumentar anualmente la cantidad que el inquilino paga en concepto de renta.
El incremento anual de la renta podrá producirse al año de firmar el contrato y se actualizará según el Índice de Precios al Consumo. Así, la actualización no podrá superar el resultado de aplicar la variación porcentual experimentada por el IPC en el momento en cuestión.

La Ley de Arrendamientos Urbanos es compleja y se estudia dentro de una rama del derecho bastante concreta.
Sin embargo, existe formación online que permite a los profesionales del sector de la construcción ponerse al día y dominar con aún mayor eficiencia su terreno. Y es que controlar los aspectos legales relacionados con el sector inmobiliario es una auténtica necesidad para los profesionales que se dedican a ello, ¿no crees? Déjanos tu opinión al respecto en los comentarios.